Yo soy el árbitro y le saco roja al portero de naranja, roja al suplente, y roja y un razzie al jugador en el suelo.
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Si soy el árbitro expulso al portero por coger así a un jugador rival, pero también al "lesionado" por volver a entrar y al del banquillo que le ayuda.
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Cada vez más a favor de implantar el tiempo efectivo, y que el partido dure 90 minutos con el balón en juego.
Y si es demasiado para las piernas, que lo bajen a 80 minutos, o los que sean. Pero que se juegue lo que se tiene que jugar, y no lo que le salga de la polla al trencilla de turno.
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#4 #4 salzig dijo: #3 Entre el VAR y los descuentos de diez minutos ya se han cargado buena parte de la ilusión y la magia del fútbol, ahora lo quieres convertir en fútbol sala o en basket.@salzig hablo de acabar con esos descuentos de 7, 8, 10, o los minutos que le salga de los huevos al árbitro.
Lo del VAR me toca los cojones por no poder celebrar un gol hasta que pasen unos minutos, por si lo anulan, cosa que al Madrid le sucede con demasiada frecuencia, por cierto. Para ello podrían poner tecnologías como el fuera de juego semiautomático o la del gol fantasma, cosa que LaLiga no ha querido pagar. Porque la mayoría de goles que se anulan desde el VAR son por fueras de juego (algunos milimétricos), que se tiran bastante rato para trazar las líneas... no sé si te has dado cuenta de eso.
Y sí, mejor que sea como en baloncesto. O es que tú prefieres ver cómo pierden tiempo, fingen lesiones, hacen faltas constantes, etc.?
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En las calles de Nápoles, el fervor se respira,
Donde los napolitanos sueñan con la gloria infinita.
Al Camp Nou marchan con paso firme y decidido,
Con la determinación de un guerrero endurecido.
Como los romanos en suelo ibérico lucharon,
Los azzurri en el campo catalán desafiarán.
Con la pasión del Vesubio, arderán en su juego,
Dispuestos a conquistar el campo con su fuego.
En el Camp Nou, como en una batalla ancestral,
Los napolitanos se alzarán en pie triunfal.
Con el balón como su arma, marcharán al ataque,
Determinados a derrotar al poderoso Barcelona, sin piedad ni réplica.
En cada regate, un golpe de espada certero,
En cada gol, un grito de victoria sincero.
Nápoles, ciudad de valientes y soñadores,
Hacen historia en el Camp Nou, entre clamores.
¡Y al final del día, la hazaña se cumple!
El Barcelona, derrotado y humillado, sucumbe.
Los napolitanos avanzan, su energía invicta,
¡A los cuartos de final, con gloria infinita!
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#3 #3 don_marco dijo: Cada vez más a favor de implantar el tiempo efectivo, y que el partido dure 90 minutos con el balón en juego.
Y si es demasiado para las piernas, que lo bajen a 80 minutos, o los que sean. Pero que se juegue lo que se tiene que jugar, y no lo que le salga de la polla al trencilla de turno.Entre el VAR y los descuentos de diez minutos ya se han cargado buena parte de la ilusión y la magia del fútbol, ahora lo quieres convertir en fútbol sala o en basket.
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Y si es demasiado para las piernas, que lo bajen a 80 minutos, o los que sean. Pero que se juegue lo que se tiene que jugar, y no lo que le salga de la polla al trencilla de turno.
Lo del VAR me toca los cojones por no poder celebrar un gol hasta que pasen unos minutos, por si lo anulan, cosa que al Madrid le sucede con demasiada frecuencia, por cierto. Para ello podrían poner tecnologías como el fuera de juego semiautomático o la del gol fantasma, cosa que LaLiga no ha querido pagar. Porque la mayoría de goles que se anulan desde el VAR son por fueras de juego (algunos milimétricos), que se tiran bastante rato para trazar las líneas... no sé si te has dado cuenta de eso.
Y sí, mejor que sea como en baloncesto. O es que tú prefieres ver cómo pierden tiempo, fingen lesiones, hacen faltas constantes, etc.?
Donde los napolitanos sueñan con la gloria infinita.
Al Camp Nou marchan con paso firme y decidido,
Con la determinación de un guerrero endurecido.
Como los romanos en suelo ibérico lucharon,
Los azzurri en el campo catalán desafiarán.
Con la pasión del Vesubio, arderán en su juego,
Dispuestos a conquistar el campo con su fuego.
En el Camp Nou, como en una batalla ancestral,
Los napolitanos se alzarán en pie triunfal.
Con el balón como su arma, marcharán al ataque,
Determinados a derrotar al poderoso Barcelona, sin piedad ni réplica.
En cada regate, un golpe de espada certero,
En cada gol, un grito de victoria sincero.
Nápoles, ciudad de valientes y soñadores,
Hacen historia en el Camp Nou, entre clamores.
¡Y al final del día, la hazaña se cumple!
El Barcelona, derrotado y humillado, sucumbe.
Los napolitanos avanzan, su energía invicta,
¡A los cuartos de final, con gloria infinita!
Y si es demasiado para las piernas, que lo bajen a 80 minutos, o los que sean. Pero que se juegue lo que se tiene que jugar, y no lo que le salga de la polla al trencilla de turno.Entre el VAR y los descuentos de diez minutos ya se han cargado buena parte de la ilusión y la magia del fútbol, ahora lo quieres convertir en fútbol sala o en basket.